Nos visita Juanjo Goméz, salesiano que coordina la labor que se realiza con los niños de la calle en Porto Novo (Republica de Benín).
Porto Novo, capital oficial de Benin, es una ciudad donde cada día que pasa aumentan los niños y niñas que duermen en la calle. Es un grave problema al que se enfrenta toda África. Se esta perdiendo el sentido de familia que tenían estos pueblos del África Subsahariana.
Por otra parte, es una ciudad fronteriza con Lagos, capital de Nigeria. Desde hace unos años, la frontera con Nigeria, gran productora de petróleo, es lugar de todo tipo de contrabando, con lo que esto significa en el campo de la delincuencia. Todo ello hace que el nivel de delincuencia aumente día a día y se vean niños y niñas de entre 10 y 12 años, e incluso más pequeños, enrolados en pequeñas bandas dirigidas por algún adulto sin escrúpulos.
Hay además niños y niñas que son rechazados por sus familias fundamentalmente debido a la poligamia, a la extrema pobreza o a la creencia de que todos los males de la familia vienen a causa de estos hijos. Y no solo son abandonados, ya que otros corren la suerte de ser vendidos como “esclavos” para trabajar en las minas o las plantaciones de éste u otros países cercanos (Togo y Nigeria principalmente).
Para dar respuesta a estos problemas, en 1995 los salesianos fundaron el Hogar Don Bosco para los Niños de la Calle. Hoy en día este proyecto esta organizado en fases diferenciadas mediante tres casas.
Podremos escuchar de primera mano la marcha y funcionamiento de ese ambicioso proyecto.
También Juanjo quiere agradecernos nuestra solidaridad y esfuerzo a la hora de recoger alimentos y enviárselos allí, cuando ellos han pasado una gran necesidad, como ocurrió recientemente.
Fundación Jóvenes y Desarrollo. Cantabria 